Greendök cuenta con la metodología llave en la que un interlocutor único se encarga de gestionar con el cliente todas las actuaciones del proyecto.
Este interlocutor coordina un equipo multidisciplinar que ejecuta cada actuación según su especialidad.
Con esta metodología el proyecto se plantea como un paquete integrado donde están cerrados y fijados de antemano el alcance de la actuación, el precio y el plazo de ejecución.
El paquete incluye la redacción de proyectos y la gestión de todos los trámites legales necesarios, así como la puesta en operación de los equipos.