¿Puede nuestra silla ayudarnos a innovar?
Pensemos en Please, una silla innovadora en sí misma. En su nacimiento revolucionó todo el concepto de sillería tradicional mediante un nuevo sistema de respaldo flexible mediante el cual es la silla la que se adapta al usuario y no al contrario como sucedía hasta ese momento.
El usuario de Please está predispuesto a la innovación; la posición sentada es sin duda es aspecto más íntimo del puesto de trabajo y una silla innovadora nos invita a innovar. Pero no es solo una cuestión psicológica. La persona que está sentada en Please está más cómoda, se cansa menos y por lo tanto es más productiva. Su materia gris produce más por unidad de tiempo. Objetivamente un trabajador del conocimiento rendirá más en esta silla.