Hemos visto en artículos anteriores cómo la privacidad es un concepto que vuelve al diseño de espacios de trabajo para dar respuesta a las necesidades de concentración y confidencialidad que tienen los trabajadores en las empresas tanto a nivel individual como colectivo. Hemos visto también que estas necesidades son cambiantes en el tiempo.
Ahora bien, se trata de un concepto flexible. En primer lugar podemos hablar de privacidad acústica y visual. El primer caso responde a la necesidad de no oír o no que no nos oigan, y el segundo a la necesidad de no ver o no ser vistos. Es importante determinar qué tipo de privacidad necesitamos ya que la comunicación es otro elemento esencial en las organizaciones y podemos implementar soluciones de privacidad acústica manteniendo la comunicación visual y viceversa.