La sanidad es un sector dinámico en continua evolución. Contribuyen a ello entre otros factores el aumento de la esperanza de vida de la población, el acceso de un cada vez mayor número de personas a la sanidad, los continuos avances tecnológicos y los cambios en los modelos de gestión.
Las necesidades de los espacios sanitarios son cambiantes, pero sin embargo los inmuebles por lo general están concebidos como elementos rígidos al estar construidos con tabiques de fábrica de ladrillo. Imaginemos por contra un centro sanitario cuyos tabiques estén fabricados con el sistema UR803. Ante cambios en las necesidades del servicio los gestores podrán realizar rápidamente una redistribución de los espacios a muy bajo coste y sin necesidad de hacer obras. Este es el primer elemento para lograr un espacio sanitario flexible.