La innovación: una necesidad para nuestras empresas
La globalización de los mercados ha traído la deslocalización y el agotamiento de muchos negocios tradicionales. Las economías emergentes son capaces de explotar tecnologías conocidas con unos niveles de coste mucho menor. Resultan por tanto más competitivas que las economías desarrolladas en muchos sectores maduros.
¿Significa esto que hay que tratar de reducir costes para bajarnos al nivel de las economías emergentes? De ningún modo. Ésto solo nos llevaría a espirales bajistas en las que tenemos todas las de perder. ¿Cuál es entonces el camino? La innovación.
Innovando estamos creando oportunidades de negocio que no son accesibles para estas economías. La innovación es la locomotora del progreso; lo que innovamos hoy serán tecnologías maduras del mañana que explotarán otras economías emergentes, pero que hoy deben ser nuestra principal fuente de ingresos. Y mañana si queremos seguir liderando el progreso debemos seguir innovando.
Si entendemos cómo está cambiando el mundo comprenderemos cómo para las economías desarrolladas innovar es hoy, más que nunca, una necesidad.
Me tengo que reinventar
¿Y qué hago con mi negocio tradicional que antes me proporcionaba unos estupendos dividendos y que hoy en día está parado? ¿Esperar a que acabe la crisis?
Evidentemente no. Me tengo que reinventar. Tengo que ser capaz de darle vuelta para que pueda funcionar y ser rentable en el entorno actual. Quedarme con lo esencial que pueda aportar valor al mercado y cambiar el resto para que la maquinaria funcione. Para ello tengo que ser abstraerme y ser abierto de mente, empezar con una hoja en blanco y volver a escribirla como me gustaría que fuera hoy en día empleando en ello mi conocimiento y experiencia actuales para hacerlo viable.
Uno de los primeros pasos puede ser cambiar mi forma de trabajar. Hoy en día los trabajadores del conocimiento, los llamados cuellos blancos ya no trabajan como antes. Informaciones que antes eran privadas o de difícil acceso hoy en día están al alcance de todos gracias a Internet. La colaboración y el trabajo en equipo ganan enteros en nuestro día a día y las nuevas tecnologías están cada vez más presentes.
Técnicas como el downsizing de espacios pueden hacerme ahorrar mucho sin perder capacidad operativa. Nuevas formas de trabajar pueden estimular el desarrollo del talento que teníamos adormecido o atraer nuevo talento a nuestra organización. Espacios comprometidos con la innovación pueden lanzarnos hacia la modernización.
Me tengo que reinventar, y tal vez el mejor comienzo sea reinventar mi espacio.
Imagen cedida por Steelcase.
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